CHINA: ¿EN LA TRAMPA DE INGRESOS MEDIOS O DE EE.UU.?

En la semana pasada dos tópicos llamaron la atención respecto de China, economía que no conozco mucho sino a través de los datos macroeconómicos. El primero vino de Nouriel Roubini, señalando el riesgo que correría la potencia oriental de caer en la Trampa de los Ingresos Medios, y, el segundo, de parte de la Secretaria del Tesoro de EE. UU., Janet Yellen, añadiendo que “La aceleración de la industria china está distorsionando la economía mundial” 

https://www.bloomberglinea.com/2024/03/27/la-aceleracion-de-la-industria-china-esta-distorsionando-la-economia-mundial-yellen/

Nouriel Roubini, uno de los pocos que anticipó la crisis financiera del 2008, aunque hasta el presente todavía no registró otro éxito similar, advierte la trampa de ingresos medios para China:

¿Será China la excepción? Después de más de 30 años de tasas de crecimiento cercanas al 10 %, su economía se desaceleró bruscamente en esta década; incluso el año pasado —cuando experimentó un fuerte rebote después de la era de la «política de cero COVID-19»— su crecimiento según los indicadores oficiales solo fue del 5,2 %. Aún peor es que según las estimaciones del Fondo Monetario Internacional su crecimiento caerá al 3,4 % anual para 2028, y teniendo en cuenta sus políticas actuales muchos analistas prevén que la tasa de crecimiento potencial solo será del 3 % para fines de esta década. Si eso ocurre, China habrá efectivamente caído en la trampa del ingreso medio

https://www.project-syndicate.org/commentary/china-middle-income-trap-more-likely-with-state-capitalism-by-nouriel-roubini-2024-04?barrier=accesspaylog

¿Pero, resumiendo, en qué consiste la trampa de los ingresos medios?

En 2007, el Banco Mundial, publicó un informe, en el que se sugería que Asia Oriental pronto se convertiría en una región de ingresos medios y planteaba la idea de la «trampa de ingresos medios», concepto que no definió.  En 2011, Homi Kharas y Harinder Kohli (2011) profundizaron en el concepto, especificando que cuando un país escapa de la trampa de la pobreza en la etapa de desarrollo de bajos ingresos y entra en la fase de desarrollo de ingresos medios, el país puede enfrentar un estancamiento del crecimiento y la incapacidad de seguir ascendiendo en la escala hacia el rango de ingresos altos.

Shaojie Zhou, Angang Hu en What Is the “Middle Income Trap”, precisan que: 

“…cuando un país entra en la categoría de país de ingresos medios desde la etapa de desarrollo de ingresos bajos, pierde las ventajas comparativas de un costo de mano de obra más barato y se vuelve menos competitivo en las exportaciones de manufacturas frente a los países de ingresos bajos y bajos salarios debido al aumento de los costos laborales. Si el país no logra avances sustanciales en materia de innovación tecnológicasu capacidad para competir con las economías desarrolladas en el ámbito de los productos de alta tecnología e innovación se vería obstaculizada, lo que se traduciría en una pérdida de competitividad de las exportaciones. Por lo tanto, el país puede caer en la difícil situación de la disminución del crecimiento económico o incluso experimentar una regresión económica, lo que hace que el país quede atrapado en el estado de ingresos medios y pierda la capacidad de avanzar hacia el estado de ingresos altos”. 

https://link.springer.com/chapter/10.1007/978-981-15-6540-3_1

De esta manera, para salir de la supuesta trampa de ingresos medios había que ser más competitivos en las exportaciones totales, en las de manufacturas y especialmente en productos de alta tecnología.

Competitividad de las exportaciones de China

Si se consultan las estadísticas de la OMC (2024), se encuentra que China ocupa en 2023 el primer lugar como exportador en el mundo con una participación del 14,4% del total y en el segundo lugar EE. UU. con un 8,3% del total mundial.  En las exportaciones de manufacturas China tiene el primer puesto, así como, por ejemplo, en las exportaciones de equipo de oficina y telecomunicaciones, en cambio EE. UU. está en tercer lugar como exportador de manufacturas y en el sexto puesto en exportaciones de equipo de oficinas y telecomunicaciones. Es en las exportaciones de automóviles que EE. UU. está en segundo lugar mientras que China en el quinto lugar según la OMC (2024).

Gráfico 1: Exportaciones de China vs exportaciones de EE. UU.:

2000-2023

En millones de dólares

Fuente: Elaboración propia con datos OMC (2024)

Si se analiza la evolución de las exportaciones desde principios de este siglo, en el año 2000 tanto las exportaciones totales como de manufacturas de China representaban solo un tercio de las exportaciones de EE. UU., en 2005 se cerró la brecha en las exportaciones de manufacturas y en el 2008 en las exportaciones totales al equiparar sus valores exportados, para llegar en 2023 las exportaciones de China a ser superior en 1,7 veces a las EE. UU.,  mientras que en las exportaciones de manufacturas a una proporción de casi en tres veces. El dato curioso es que mientras China desde sus inicios adoptó una estrategia de exportaciones de manufacturas al representar casi la totalidad de sus exportaciones, EE. UU. en el año 2000 sus exportaciones de manufacturas representaban el 82,7% del total, en el 2022 declinó su participación hasta representar el 57,9% del total (Gráfico 1). 

Desde el punto de vista de la trampa de los ingresos medios, que en realidad es una trampa de las exportaciones de productos básicos y manufacturas intensivas en mano de obra, no se ha dado en el caso de los países del Asia Oriental que lograron desarrollar sus exportaciones de manufacturas e incorporar contenido tecnológico, mientras que las economías de América Latina y el Caribe cayeron en la trampa al no lograr diversificar sus exportaciones manteniéndose básicamente como exportadores de commodities.

¿Competencia desleal?

El problema de la superación de China al líder mundial en exportaciones en otrora en lugar de que constituya un ejemplo se convirtió en un estigma y una maldiciónPrimero, se vio con buenos ojos que se incorporara China a la OMC en diciembre de 2001, a fin de que se sujetara a las reglas y disciplinas multilaterales y, sin embargo, las exportaciones de manufacturas continuaron con su dinamismo (Gráfico 1). Segundo, al pensar que el crecimiento de sus exportaciones de manufacturas era productos de prácticas desleales como los subsidios estatales y dumping de precios, China fue objeto de medidas correctivas en la OMC como son la investigación y aplicación de derechos compensatorios para corregir subsidios y de derechos antidumping para contrarrestar precios artificial o temporalmente bajos. Tercero, se dice que China se aprovechó de la globalización, aunque se supone que aquella se planeó para que aprovecharan y no se perjudicaran los países. China tiene tendencia a superávits comerciales, aunque ocupa el segundo puesto en el mundo como país importador de bienes y también como importador de servicios. Por último, como resultado de la competencia con las grandes empresas tecnológicas EE. UU. aplicó en los últimos años medidas restrictivas a algunas empresas y posteriormente amplió su ámbito al campo de la tecnología bajo el argumento de un posible uso militar estratégico que afectaba su doctrina de la seguridad nacional donde es una amenaza desde un chip hasta un cohete enviado a la Luna. Las medidas de protección de Trump, al margen de la OMC, fueron de carácter unilateral.

https://www.researchgate.net/publication/340739350_El_nuevo_proteccionismo_Trump_Brexit_y_Bolivia

Es en este contexto hay que situar las declaraciones de la Secretaria del Tesoro de EE. UU., Janet Yellen, que en nombre de todos los países y de las instituciones encargadas de velar las reglas multilaterales acusa que “La aceleración de la industria china está distorsionando la economía mundial”. Esta declaración debería hacerla y demostrarla EE. UU. ante la OMC institución que supuestamente tiene que velar por un comercio equitativo sin distorsiones, empero, EE. UU. desde Trump que no le da bola alguna a la OMC, puesto que aplicó aranceles y medidas no arancelarias en forma unilateral. Según Yellen: “El exceso de capacidad de China distorsiona los precios y los patrones de producción mundiales y perjudica a las empresas y los trabajadores estadounidenses, así como a empresas y trabajadores de todo el mundo”. Por tanto, EE. UU. seguirá protegiendo sus industrias del avance de China, añadiendo que “no querría descartar otras posibles formas de protegerlas”.

https://www.bloomberglinea.com/2024/04/04/yellen-dice-que-eeuu-seguira-protegiendo-sus-industrias-frente-al-avance-de-china/

Resulta ahora que el exceso de capacidad es una causa de la competencia desleal, causa que no figura en las Normas de prácticas desleales de la OMC, por un lado, si algo caracterizó al capitalismo fue alentar economía de escala para así tener precios más competitivos favoreciendo de esta manera los oligopolios. Por otro lado, EE. UU. es un ejemplo en las ayudas estatales o subsidios. Fue el pionero en subsidiar a la agricultura, en especial al trigo, con precios de sostén y “donando” sus excedentes al mundo en desarrollo, a precios desleales, puesto que la “ayuda” norteamericana era a precio cero, y lo curioso es que sacó a la agricultura de las prohibiciones a la aplicación de ayudas estatales en la OMC. Y hablando de ayudas estatales gran parte de la cuarta revolución industrial no se gestionó en un garaje en Silicom Valley como cuenta la versión popular y cinematográfica, sino en el gran complejo militar industrial estratégico estadounidense.  Para Mazucatto (2016) es un ejemplo de misión compartida el caso del Estado emprendedor en EE. UU., puesto que describe una serie de estudios de casos en diferentes sectores, incluyendo biotecnología, farmacéuticas y tecnología limpia, para mostrar que el estado está haciendo las inversiones de alto riesgo antes de que el sector privado se involucre. En un capítulo examina el iPhone, describe doce tecnologías que lo hacen ‘inteligente”-internet, GPS, su pantalla táctil y el Siri activado por voz- afirmando que fueron financiadas por el Estado.

https://juandemariana.org/sites/default/files/investigacion/20160803-mitos-y-realidades-estado-emprendedor.pdf

Gráfico 2: Participación de la industria de China en el producto mundial

Fuente: https://cepr.org/voxeu/columns/china-worlds-sole-manufacturing-superpower-line-sketch-rise

Yellen, en realidad se refería al problema de EE. UU. puesto que según Bloomberg “La secretaria del Tesoro, Janet Yellen, sugirió que Estados Unidos conservará la opción de proteger nuevos sectores industriales contra China después de lo que describió como inversiones estatales masivas de la nación asiática en áreas que incluyen energía limpia”. Dijo que la política industrial china “condujo a un exceso de inversión sustancial” en productos como el acero y el aluminio, lo que ayudó a la producción y el empleo de ese país “pero obligó a la industria en el resto del mundo a contraerse”. “Ahora, vemos un exceso de capacidad en industrias ‘nuevas’ como la solar, los vehículos eléctricos y las baterías de iones de litio”.

https://www.bloomberglinea.com/2024/04/04/yellen-dice-que-eeuu-seguira-protegiendo-sus-industrias-frente-al-avance-de-china/

Lo cierto es el meteórico ascenso de China en el sector manufacturero, de un 5% de la cuota de la producción bruta mundial en 1995 subió a un 35% en 2020, aunque se ha desacelerado desde 2015 y parece haberse estancado en alrededor de un tercio de la producción mundial (Gráfico 2). En cambio, EE. UU. que en el 1995 participaba con el 22% de la producción mundial manufacturera, cayó de importancia en 2020 a un 12%, tendencia que se dio en otros países avanzados, como Japón con un desplome de un 20% a un 6% de participación del total del producto mundial manufacturero.

Llama la atención que recién en los últimos años y por razones geopolíticas de la supuesta seguridad nacional es que se empieza a cuestionar el tipo de la política industrial de un país e incluso su escogencia de un modelo económico y lo más curioso, la participación del Estado con sanciones económicas dirigidas al sector tecnológico (Gráfico 3).

Gráfico 3: Sanciones de EE. UU. a China en el sector tecnológico

Lo del ascenso de los países asiáticos se sabía desde la década de los noventa junto con el tipo de políticas industriales que aplicaban con alta participación del Estado. Gran parte de estos casos exitosos no eran democracias liberales precisamente como Corea del Sur y Taiwán, que en 2020 participan con el 3% y un 2% de la producción manufacturera mundial.

¿Qué tienen entonces que hacer los países con sus políticas industriales y tecnológicas? Esperar el visto bueno de aplicarlas por parte de EE. UU, una especie de “certificación mundial”. Me imagino a la India, dentro de unos pocos años, puesto que ahora está como séptimo exportador mundial de productos y como el tercer exportador mundial de servicios digitales. En síntesis, ¿no debería mejor llamarse la trampa de EE. UU? 

*Economista. Expresidente Banco Central de Bolivia

Artículo publicado en:

https://lanuevamirada.cl/china-en-la-trampa-de-ingresos-medios-o-de-ee-uu/

Escrito por: Gabriel Loza