¿Qué pasará con el turismo tras la crisis del Covid-19?
En estos días de confinamiento, pequeñas, medianas y grandes empresas del sector turístico no dejan de pensar, especular, intentar anticipar cuál será la nueva normalidad una vez que se acabe el confinamiento del Covid-19. Y cierto es que cada vez hay más pistas, pero sigue habiendo gran incertidumbre. A continuación, te explicamos qué pasará con el turismo tras la crisis por el Covid-19, ¡no te lo pierdas!
Sin ninguna duda, el turismo es de los sectores más afectados por la pandemia. La esencia del turismo es el movimiento, el tránsito de personas, y ahora mismo esa movilidad está prohibida. Pero ¿qué pasará una vez que termine el confinamiento? ¿Cuánto tardará la población en recuperar sus hábitos de viajes? ¿Los recuperará por completo? Todo apunta a que la nueva normalidad no se parecerá a la anterior, al menos hasta que haya una vacuna.
Acostumbrados a ver playas masificadas, museos repletos, bares hasta arriba, calles repletas de transeúntes, tenemos que hacernos a la idea de que este verano será muy diferente. ¿Cómo será exactamente? El Gobierno nos da pistas con cuentagotas, probablemente porque ellos tampoco lo tienen aún decidido. Y esta duda, causa gran preocupación por el impacto económico en turismo y la respuesta depende de varios factores que todavía no conocemos.
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Factores que afectarán al turismo
Entre estos factores están las decisiones tomadas por el Gobierno en cuanto a movilidad de personas, la aperturas de espacios públicos, aforos limitados, pero también la aversión al riesgo, el impacto económico en las familias, el incremento de precios de los servicios de ocio, la posibilidad de un nuevo brote del virus, etc.
Aun sin conocer cómo se desarrollarán los hechos, nos imaginamos que seremos muy cautos y preferiremos evitar los espacios masificados, los servicios que supongan compartir o/e intercambiar objetos o cercanía excesiva entre desconocidos. Por tanto, el pronóstico para la recuperación turística no es alentador a corto plazo.
Si algo nos da esperanza, es la resiliencia turística en un contexto histórico. Este sector ha conseguido resurgir y generar empleo tras cada crisis. La cuestión ahora es cuánto durará la crisis actual. Sabemos que el turismo se recuperará, sabemos que volverá a generar empleo, probablemente surgirán nuevos modelos de negocios turísticos adaptados a las nuevas circunstancias y necesidades. La pregunta es cuándo pasará.
La Organización Mundial del Turismo (OMT) no se atreve de momento a hacer predicciones. El secretario general de la OMT, Zurab Pololikashvili, considera que es muy pronto para hacer una evaluación del impacto de la Covid-19 en el turismo. Con el fin de elaborar una respuesta unida, la OMT ha creado un Comité Mundial de Crisis para el Turismo y está preparando una guía mundial para la recuperación tras la crisis económica y social provocada por el Coronavirus.
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Tecnología, el gran aliado del turismo
En esta era digital, en la que confiamos en las apps para tomar decisiones, la tecnología puede ser un gran aliado. Puede ayudar a mantener distancias y prevenir contagios.
Pueden haber apps que avisen de aglomeración de gente, que regulen el aforo y horarios en lugares turísticos muy frecuentados, en restaurantes, museos, … Apps que permitan sustituir las audioguías por nuestros teléfonos inteligentes. Veo una gran oportunidad en el Internet of Things. Objetos interconectados que nos guíen e informen manteniendo las distancias con los demás.
No cabe duda que los hoteles tienen una gran reto por delante. Hoteles, apartamentos, casas rurales, alojamiento vacacional, etc. deben dar garantías de higiene, de lo contrario será muy difícil que tengan clientes mientras se mantenga la aversión al riesgo del virus. Y aquí es cuando los comentarios y valoraciones de limpieza tendrán más peso que nunca. ¿Pero será suficiente tener una buena reputación para que el cliente reserve ese alojamiento? Sellos de confianza y garantía de higiene en forma de certificados reforzarían la confianza del cliente.
También es posible que esta crisis sanitaria acelere la innovación en los hoteles. Check ins automáticos a través de máquinas para evitar el contacto con otros humanos, sistemas robóticos de limpieza, domótica en las habitaciones, entre otras opciones. La tecnología permite reducir el contacto con otras personas, pero a su vez, conllevaría una parte negativa, la disminución de oportunidades de empleo.
Más complicada es la situación de los restaurantes. Centenares de personas compartiendo mesas, sillas, vasos, cubiertos, pinzas, máquina de café, comida y bebida. Este problema tiene una solución mucho más complicada y cara. Regular el aforo, desinfección constante, distancia de 1 metro en la cola, utensilios individuales, … Ahora sería una gran oportunidad para el uso de cubiertos de un solo uso de material sostenible, ¡no queremos que la crisis del Covid-19 agrave la crisis de la contaminación del plástico! Pero, lamentablemente, también sabemos que muchos alojamientos, bares y restaurantes no abrirán sus puertas esta temporada.
Y es que habrá que superar la crisis, resistir y pensar en la recuperación una vez que tengamos vacuna. Y por ahora tendremos que aprender a hacer turismo respetando la distancia social establecida y las máximas medidas de higiene.
