OPTAR POR SEGUROS, EN ÉPOCA DE CRISIS
Por: Mauricio Franco M.
Terminando el año 2024 y por iniciar un nuevo año, los bolivianos nos encontramos en una coyuntura desafiante, con un panorama complejo por el incremento en los precios de los bienes y servicios, escasez de dólares, incremento del desempleo, baja inversión extranjera, incertidumbre política previa a las elecciones de 2025, entre otras. En este contexto, cada decisión financiera que tomamos tiene un impacto más significativo y proteger nuestro patrimonio, activos, bienes, salud y vida, se convierte en una prioridad estratégica para afrontar los retos de un futuro incierto.
En épocas de crisis, los eventos negativos, en lenguaje de seguros, “los siniestros”, como lesiones personales por accidentes, enfermedades que podemos contraer, daños de nuestros bienes por desastres naturales, acción de terceros o simples situaciones inesperadas, no solo afectan nuestra estabilidad emocional, sino que también pueden poner en riesgo nuestra estabilidad económica familiar. La falta de planificación y protección puede llevarnos a perder lo que tanto esfuerzo nos costó construir, profundizando aún más la crisis financiera que podemos vivir.
Los acontecimientos negativos que siempre suceden en las fiestas de fin de año, así como la incertidumbre actual, nos recuerda que nadie está exento de enfrentar imprevistos. Un accidente de tránsito, un incendio en el hogar o una enfermedad inesperada pueden generar gastos no planificados difíciles de asumir, especialmente cuando los ingresos son limitados y los ahorros no son significativos. En estos momentos, contar con un seguro adecuado indefectiblemente puede marcar la diferencia entre superar el problema o quedar atrapado en una espiral de pérdidas y deudas.
Contrario a lo que muchos piensan, los seguros no son un lujo, sino una herramienta esencial para proteger nuestro patrimonio en tiempos difíciles. En un entorno como el actual, donde la inflación y la escasez de divisas encarecen el costo de bienes y servicios, reponer un activo perdido o cubrir gastos médicos elevados puede ser financieramente complicados sin el respaldo de un seguro.
Los seguros nos permiten transferir los riesgos financieros a una Compañía de Seguros, pagando una prima que, en comparación con el costo total de un siniestro, resulta significativamente más baja. Este respaldo no solo protege nuestros bienes, sino que también nos da tranquilidad para enfrentar los desafíos diarios con mayor confianza.
La cultura del seguro en Bolivia sigue siendo limitada, en parte debido a la percepción de que es un gasto innecesario. Sin embargo, en épocas de crisis como la actual, esta visión debe transformarse, ya que invertir en seguros es una forma eficaz de protección para blindar nuestro futuro financiero y proteger lo que hemos construido con esfuerzo.
En la coyuntura actual de Bolivia, es de alta importancia contar con seguros según nuestra actividad, de forma personal proteger nuestra salud y vida es crucial, para poder enfrentar enfermedades, que de ser graves pueden significar elevados costos para su tratamiento, así como la muerte prematura, con el propósito de dejar a nuestras familias con un monto de dinero que les permita mantener y continuar el mismo estilo de vida ante nuestra ausencia. De igual forma, proteger nuestros bienes a través del seguro de automotor como de incendio o todo riesgo, para tener cobertura por daños en nuestros vehículos como viviendas, para contrarrestar los daños ocasionados por choques, incendios, robos o desastres naturales, u otros.
Por otra parte, las empresas e instituciones, de igual forma deben resguardar tanto a sus colaboradores como sus bienes y activos, con seguros de vida, accidentes personales y salud, para proteger la integridad de sus trabajadores, y contar con seguros de todo riesgo de daños a la propiedad, transportes, responsabilidad civil, automotores, riesgos de construcciones, riesgos de ingeniería, banqueras, riesgos cibernéticos y otros tipos de seguros que apliquen según su actividad, para contar con el resguardo necesario ante imprevistos que puedan atentar contra el patrimonio de la empresa o institución.
Es importante evaluar nuestras necesidades específicas y buscar pólizas que se adapten a nuestra realidad económica. Consultar con asesores especializados y comparar opciones, es un paso esencial para garantizar que contamos con la cobertura adecuada al mejor costo posible.
La incertidumbre o crisis que vivimos no puede paralizarnos, sino que debe impulsarnos a tomar decisiones inteligentes y responsables, contratar seguros no elimina los riesgos y posibles eventos negativos que podamos sufrir, pero sí nos da la posibilidad de enfrentarlos con una red de protección financiera que nos permite recuperarnos y continuar avanzando, sin que nos haya afectado tan fuertemente al menos en nuestro patrimonio.
En un contexto donde la crisis financiera y social puede prolongarse, los seguros se posicionan como una herramienta indispensable para garantizar nuestra estabilidad y la de nuestras familias. Ahora más que nunca, proteger nuestro patrimonio, activos, salud y vida no es solo una opción, es una necesidad impostergable.
¿Tú, cuentas con algún seguro actualmente? Si no lo tienes, evalúa las opciones y tus necesidades; es momento de prepararnos para cualquier eventualidad, porque en tiempos de crisis, la prevención es la clave para la resiliencia.