EXISTEN MEDIOS PARA CONTROLAR LA CORRUPCIÓN

Hoy en día, existe una gama de medios para controlar la corrupción. Sería grandioso decir que con ellos se la eliminará, pero esa es una tarea que ni la más moderna tecnología puede. Sin duda, es necesario introducir un amplio uso de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) y la inteligencia artificial (IA) para llevar adelante medidas que eviten la corrupción.

Ambas poseen herramientas poderosas para fortalecer la transparencia, la eficiencia en los procesos de adquisición gubernamental y la rendición de cuentas. Algunas formas son utilizadas por el aparato estatal pero, no han sido introducidas en todas las instancias que realizan adquisiciones, y tampoco su utilización ha sido lo suficientemente difundida.  A continuación, menciono algunas formas en las que las tecnologías actuales pueden implantarse:

1. Transparencia y acceso a la información: Las TIC facilitan el acceso a la información pública y promueven la transparencia en los procesos de adquisición y adjudicación de obras del Estado y de sus instituciones de todo orden. Significa que se deben desarrollar plataformas en línea y portales de datos abiertos que permitan a los ciudadanos y otros funcionarios públicos (del mismo u otros poderes del Estado) acceder de manera fácil y rápida a información relevante, tales como: presupuestos, contratos públicos y declaraciones de ingresos de funcionarios. Esto ayuda a detectar posibles casos de corrupción y fomenta la rendición de cuentas y la “accountability” (responsabilidad de entregar lo comprometido con eficacia, eficiencia, en los términos contratados sin comisiones y transparencia en todo el procedimiento de contratación).
2.  Gestión eficiente de datos: Los enormes avances alcanzados por la IA colocan medios de control y supervisión inimaginables hace apenas un lustro. Hoy pueden analizarse grandes volúmenes de datos y detectar comportamientos sospechosos que siguen determinados patrones. Es posible desarrollar o ya disponer de algoritmos que  detectan anomalías y, por medio del aprendizaje automático, identifican transacciones financieras sospechosas, discrepancias en informes, estados de cuenta que no cuadran o comportamientos inusuales en los registros. Esto agiliza el proceso de detección de casos de corrupción y se obtienen respuestas rápidas y oportunas.
3. Prevención y gestión del fraude: Las TIC y la IA pueden utilizarse para introducir sistemas de detección y prevención de fraudes de maneras mucho más efectivos. Por ejemplo, algoritmos de IA pueden analizar grandes volúmenes de datos de contratos y licitaciones para identificar posibles irregularidades. Además, la implementación de sistemas electrónicos de compras, licitaciones y adjudicaciones minimiza la manipulación y el favoritismo, al tiempo que promueve la competencia y la transparencia. Asimismo, puede realizar comparaciones con precios internacionales ya sea de procesos similares en otros países o en bases de datos ya existentes para facilitar este tipo de comparaciones.
4. Denuncias y canales seguros de comunicación: Las TIC ofrecen medios seguros y confidenciales para que los ciudadanos puedan presentar denuncias de manera anónima. Plataformas en línea y aplicaciones móviles permiten a los denunciantes reportar actos de corrupción sin temor a represalias. Estos canales de comunicación seguros facilitan la recolección de información y la investigación de casos. Sin embargo, hay que establecer el otro lado que recibe esta información (funcionarios que deben estar libres de compromisos conflictivos en sus intereses) que debe ser tan confiables como el medio utilizado. Aquí ya no es solo la máquina que ayuda, es el ser humano que debe demostrar su rectitud.
5. Monitoreo, evaluación y seguimiento: Las TIC y la IA también pueden utilizarse para monitorear, evaluar y dar seguimiento a la ejecución de proyectos y programas. Existen sistemas de monitoreo, evaluación y seguimiento automatizados e inteligentes que se aplican en tiempo real. Así se permite evaluar el avance y los resultados de las iniciativas anticorrupción para identificar posibles desviaciones o irregularidades. Esto proporciona información valiosa para la toma de decisiones y facilita la mejora continua de estos procesos automáticamente gracias a la IA.

La combinación de las TIC y la IA con las estrategias de lucha contra la corrupción fortalece los mecanismos de prevención, detección y respuesta ante casos de corrupción, estén estos en el momento de transgresión o en procesos ya ejecutados. Estas tecnologías ofrecen oportunidades sin precedentes para aumentar la eficacia y la transparencia en la gestión pública. Y hoy están al alcance de quien quiera utilizarlos, esto incorpora a los gobiernos como parte de sus obligaciones, y también al público que debe organizarse en colectivos que luchen contra la corrupción utilizando lo que la tecnología de hoy ofrece. Ya nadie puede decir que no se sabía de ellos solo se trata de utilizar la tecnología en todo lo bueno que nos ofrece.