Salario Mínimo Nacional: El efecto faro

 

Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT) el salario mínimo se define como la cuantía mínima de remuneración que un empleador está obligado a pagar a sus asalariados por el trabajo que éstos hayan efectuado durante un período determinado.[1]

En Bolivia el salario mínimo actual es de Bs. 2164, en los últimos periodos la tasa de variación del SMN fue decreciente desde la gestión 2014, a partir de 2006 el salario mínimo creció en promedio de 11% hasta la actualidad, antes de este periodo el promedio fue de 9% llegando a un máximo de Bs. 440 en 2005. En gran parte esta política ayudó a reponer el poder adquisitivo de los hogares. Sin embargo, sobre esta medida surgen diversas interrogantes: ¿Cómo afecta al empleo, al bienestar y productividad? ¿Debería aumentarse o reducirse? ¿El salario mínimo ayuda a reducir la desigualdad y la pobreza? El presente artículo pretende abarcar una revisión de la literatura respecto a mercados laborales y salario mínimo, que brinde una posible respuesta a estas interrogantes.

Salario Mínimo en Bolivia 1990 2021 – En porcentaje (eje izq.) y bolivianos (eje der.)

Fuente: Instituto Nacional de Estadística INE – Bolivia

El salario mínimo por definición establece un piso salarial, es decir, un límite inferior al salario pagado a los trabajadores. La escala, la elegibilidad, la negociación colectiva, sindicatos y detalles operativos difieren de un país a otro. Una política del mínimo salarial afecta principalmente al extremo inferior de la distribución salarial. El salario mínimo se aplica a todos los trabajadores que tienen un contrato legal. En este caso se aplica a todos los trabajadores cubiertos por los convenios legales laborales.

Un desfase de esta medida es que no toma en cuenta a subconjuntos de la fuerza laboral, como los trabajadores del sector informal. En la mayoría de los países de la región latinoamericana, con un sector laboral formal donde se aplica el salario mínimo, existe una gran cantidad de mano de obra informal en el que no se aplica el salario mínimo.

Debido a estos problemas de aplicación, un aumento del salario mínimo puede, paradójicamente, reducir el salario de los trabajadores porque los trabajadores de baja productividad, desplazados del sector formal por el aumento del salario mínimo, podría aumentar la oferta de mano de obra en el sector informal, reduciendo los salarios en el mismo (Boeri & Jan Van, 2008).

Respecto a la teoría en un mercado laboral existen dos enfoques en un mercado de competencia perfecta y su contraparte bajo imperfecciones de mercado:

En competencia perfecta un salario mínimo establecido por encima del nivel de compensación del mercado tiende a reducir el empleo y aumentar el nivel de salario de equilibrio. Como resultado de estos dos efectos la introducción de un salario mínimo por encima del nivel de compensación del mercado implica cierto desempleo.

El efecto faro[2] surge en el caso de un mercado laborales duales, los salarios mínimos pueden no tener efectos negativos sobre el empleo donde el salario mínimo no se aplica al mercado laboral informal. En estas condiciones, se producen importantes efectos indirectos entre los dos sectores. Después de un aumento del salario mínimo, los trabajadores desplazados en el sector formal se trasladan al sector informal. Por lo tanto, los salarios en el sector informal caen y la oferta de trabajo en el sector formal disminuye. El salario mínimo luego reasigna los trabajos del sector formal al informal, aumentando la diferencia entre los salarios formales e informales. Este mecanismo de ajuste evita la pérdida de empleo sólo en la medida en que exista una perfecta movilidad laboral entre los dos sectores.

Fuente: The economics of imperfect labor markets. Boeri, & Van (2013)

La interpretación que brinda esta literatura es que el salario mínimo del sector formal sirve como referencia en toda la economía. Si las empresas tienen poder monopsonista[3] en el sector informal y las consideraciones de remuneración justa son relevantes, es posible que los cambios en el salario mínimo en el sector formal  conduzcan a los correspondientes aumentos en el salario promedio del sector informal. El término efecto faro se ha utilizado para denotar este fenómeno.

Finalmente, los efectos positivos del salario mínimo sobre el bienestar, aunque no necesariamente sobre el empleo, pueden generarse cuando la productividad de un trabajo depende de la inversión en educación y formación del empleado (Cahuc y Michel 1996; Acemoglu y Pischke 1999). En estas condiciones, un salario mínimo vinculante induce a los trabajadores a aumentar su productividad mediante la adquisición de una educación para no verse desplazados por el salario mínimo.

Finalmente, si bien la teoría económica indica que un salario mínimo debería reducir el empleo, una serie de imperfecciones del mercado pueden permitir que la introducción de un salario mínimo, sea coherente con el logro de niveles más altos de empleo y bienestar. Existen diferentes aspectos para analizar en cuanto a una política de salario mínimo en cuanto a su aplicación, o si debería reducirse o incrementarse, analizar esta medida en términos de bienestar, productividad y de imperfecciones en el mercado laboral y ver si la medida de salario mínimo es efectivo para reducir la desigualad de ingreso y la pobreza.

Referencias

Rebitzer, J. B., & Taylor, L. J. (1995). The consequences of minimum wage laws some new theoretical ideas. Journal of Public Economics56(2), 245-255.

Boeri, T., & Van Ours, J. (2013). The economics of imperfect labor markets. Princeton University Press.

Borjas, G. J., & Van Ours, J. C. (2010). Labor economics (pp. 346-382). Boston: McGraw-Hill/Irwin.

Souza, P. R., & Baltar, P. E. (1979). Salário mínimo e taxa de salários no Brasil.

[1] https://www.ilo.org/global/topics/wages/minimum-wages/definition/lang–es/index.htm

[2] Ver Souza, P. R., & Baltar, P. E. (1979). Salário mínimo e taxa de salários no Brasil.

[3] El monopsonio es una condición dentro del mercado en donde la demanda absoluta de un producto es ejercida entonces, por un único comprador.